En los últimos años el Ministerio Público procesó casi 900 mil denuncias por violencia familiar y en la mayoría de casos las víctimas fueron mujeres jóvenes. En el mismo periodo, 722 mujeres fueron víctimas de feminicidio y casi en todos los casos los agresores fueron sus parejas.
Aunque, debido al aumento de la violencia, las leyes han sido mejoradas para sancionar los casos más graves, la fiscal superior de familia Rita Figueroa Vásquez señaló que urge que se mejoren y actualicen las leyes para hacer más eficientes la persecución del delito y las sanciones contra los agresores de mujeres, pues en la legislación actual la violencia familiar no es un delito y los casos tienen aún un trámite civil.
Asimismo, manifestó que aunque actualmente los fiscales y jueces son capacitados en materia de género, hace falta que todos los profesionales que intervienen en el manejo de estos casos accedan a una especialización sobre la materia.
“Lamentablemente en el país no contamos con el personal especializado en el número que hace falta, sobre todo en provincias. Policías, jueces, fiscales, y defensores públicos deberían conocer desde los principios rectores en materia de género hasta la legislación que sobre el tema existe en el país”, manifestó.
Fuente: Perú21
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